G-VIR®, un guante quirúrgico revolucionario, llega de la mano de Celulosas Vascas.

El riesgo de contraer enfermedades mediante la transmisión viral a través de la sangre y los líquidos biológicos ha suscitado una verdadera toma de conciencia y una mayor vigilancia, sobre todo cuando hablamos de SIDA o Hepatitis C, de las cuales aún no se ha encontrado vacuna.

En el caso del personal sanitario, este riesgo proviene, la mayoría de las veces, de heridas en la piel producidas por el material punzante (agujas, por ejemplo) y cortante (escalpelos, bisturís...), o por cualquier otro objeto vulnerante, como las esquirlas de huesos.

Por todas estas razones, crear una barrera «dinámica» entre el personal sanitario y el paciente, protegiéndoles de las consecuencias de estos graves accidentes, es el desafío tecnológico aceptado por el guante G-VIR®, creado tras más de diez años de investigación y desarrollo.

Las tres capas del guante G-VIR® alcanzan un grosor total de 500µm, es decir, el equivalente al doble guante (2 guantes superpuestos) y se dividen en:

*Una capa mecánica externa, en contacto con los pacientes, los productos y los instrumentos a manipular.
*Una capa biológica intermedia, que contiene un líquido desinfectante (una mezcla de 8 ml de amonios cuaternarios y clorhexidina) distribuido uniformemente en forma de 300 millones de microgotitas.
*Una capa mecánica interna, recubierta con un revestimiento inerte para que el usuario se ponga los guantes con mayor facilidad.

Los guantes G-VIR® han sido ya utilizados por más de 600 profesionales sanitarios pertenecientes a más de 90 hospitales, quienes lo utilizaron en condiciones clínicas reales manifestando su satisfacción al respecto.

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